Dr. Benno Bunse
viernes, 30 de septiembre de 2016
Ediciones Especiales
El Mercurio
El director general de la agencia de desarrollo económico federal Germany Trade & Invest (GTAI) será uno de los invitados principales de las VII Jornadas Económicas Chile-Alemania 2016, organizadas por CAMCHAL, Cámara Chileno-Alemana de Comercio e Industria, donde analizará el impacto de la High-Tech-Strategy y la Industria 4.0.
Pese a todos los desafíos políticos y económicos que hoy día enfrenta Europa, Alemania sigue siendo el “motor” de su economía. ¿En qué se basa esta fortaleza de la economía alemana?
“Es la combinación de varios factores, la que define el éxito de la economía alemana, ya que a diferencia de muchos otros países, mantiene su fuerte estructura industrial.
Otro sello del país germano, son sus empresas de tamaño mediano con una fuerte vocación internacional, lo que implica una economía muy diversificada y una presencia en prácticamente todo el mundo. También permite que tengamos miles de ‘campeones’ en los que basamos el éxito económico de nuestro país, lo que nos blinda mejor frente a los vaivenes de otros mercados. Se agregan una infraestructura muy desarrollada y un sistema prácticamente único de universidades y centros de investigación.
La economía alemana es extremadamente innovadora. De hecho, lideramos por lejos la inscripción de nuevas patentes en Europa, manteniendo desde hace años el lugar número 1.
Y no nos olvidemos de nuestros trabajadores altamente calificados, quienes finalmente determinan la competitividad de Alemania como lugar de producción.
Un rol importante tienen además los sindicatos, que luchan por los derechos de los trabajadores y por mayores sueldos, pero que no se entienden a sí mismos como el enemigo de las empresas, sino más bien como un socio importante, cuyo mayor interés está en que la economía funcione y la coyuntura mejore”.
Chile sufre fuertemente por los vaivenes de los precios de los commodities. En su historia, Alemania también ha sido un país minero y tuvo que enfrentar grandes crisis. ¿Cómo logró transformarse y tomar el camino hacia una “economía del conocimiento”?
“La economía alemana entera se ha transformado muchas veces, no solamente su industria pesada. Por decenios las empresas alemanas han sido ‘global players’ teniendo que enfrentar la competencia internacional. Esto requiere una reinvención constante y exige que los productos que elaboremos, tengan que ser mejores que los de la competencia, basándose en nuestro sello de alta calidad y nuestra capacidad de innovación.
Cuando un rubro deja de ser competitivo, tiene que encontrar la manera de renovarse para poder sobrevivir o no tendrá futuro. Para ello la colaboración entre la política, el empresariado y los sindicatos es infinitamente importante.
Mirando el futuro, la ‘Industria 4.0′ implica que vivimos una nueva revolución industrial. Todo va a cambiar, los procesos de producción, los lugares de trabajo. Nosotros lo vemos como una gran oportunidad y Alemania va a ser líder en este desarrollo”.
¿En qué se basa el éxito de la High-Tech-Strategy? ¿Es una estrategia aplicable a otros países como Chile?
“El secreto del éxito de esta estrategia, está en la estrecha colaboración entre Estado, ciencia y economía. Tenemos que asegurar las correctas condiciones marco para que la ciencia y la economía en conjunto puedan proyectarse al futuro.
Los progresos que trae la Industria 4.0 se podrán utilizar en todos los ámbitos donde se ofrecen productos y servicios modernos y de alto valor. Sin embargo, la implementación de la Industria 4.0 requerirá del uso de maquinaria de alta tecnología y la existencia de capital humano extraordinariamente bien educado y formado, independientemente del lugar en el mundo donde se quieran instalar estas industrias”.
Alemania atrae inversionistas de todas partes del mundo. ¿Cuáles son las ventajas que ofrece el mercado alemán? ¿Qué buscan las empresas internacionales que invierten en Alemania?
“Cualquier empresa busca, naturalmente, generar ganancias. Para ello requiere absorber tecnología y know-how, objetivos que buscan las empresas que invierten en Alemania.
Además, desde Alemania se puede ingresar tanto a nuestro mercado nacional como al mercado europeo, que hoy día constituye el mayor mercado interno del mundo.
Si miramos a Alemania, podemos destacar además su excelente sistema científico, el mundo académico y de formación de profesionales técnicos, el Estado de Derecho y la seguridad social.
La productividad es alta, los costos de producción se ubican hoy en día en un nivel intermedio dentro de Europa. La infraestructura es moderna y recibirá masivas inversiones a futuro.
A esto se suma la protección de la propiedad intelectual y el trato igualitario para empresas alemanas y empresas internacionales.
Y no nos olvidemos de aspectos tan importantes como, por ejemplo, un buen sistema escolar gratuito, y un excelente sistema de salud. Poder vivir en un país moderno y abierto al mundo constituye un valor en sí. En definitiva, hay muchos elementos que favorecen a Alemania como lugar de inversión”.
COMPLEMENTACIÓN ECOMÓNICA
¿Cómo se percibe Chile desde Alemania?
“Cuando uno mira a Chile desde Alemania, se percibe confiabilidad, una economía sana y de poca deuda, una democracia que funciona y que ofrece certeza.
Tiene además una larga ‘tradición alemana’. Un reflejo de ello, es la trayectoria de la Cámara Chileno-Alemana de Comercio e Industria, que cumple este 2016 con orgullo 100 años. Esta estrecha vinculación ya es una buena razón para el interés de empresas e inversionistas alemanes en Chile.
Agréguele el peso de industrias como la minería que requieren maquinaria e instalaciones industriales modernas, donde las empresas alemanas tienen mucho que aportar. También la fuerte apuesta de Chile por las energías renovables, ofrece oportunidades a Alemania gracias a su fuerte expertise en este segmento. Como puede ver, Chile y Alemania se complementan perfectamente en términos económicos”.
Fuente: http://www.economiaynegocios.cl/noticias/noticias.asp?id=294495